La correa sincronizada, también denominada correa dentada o reguladora, es un tipo de correa que se caracteriza por presentar dientes que engranan con los de las poleas correspondientes, basando la transmisión de potencia en el empuje de los dientes y no en el rozamiento polea-correa. En este sentido las transmisiones por correa dentada son similares a una transmisión por engranajes, salvo que en este caso se tiene mucha más flexibilidad en la transmisión gracias a la propia correa. Se emplea en aplicaciones donde se desea una relación de velocidades constante, salvando los problemas que presentan las correas planas y trapezoidales, donde la transmisión se realiza mediante rozamiento y se puede producir deslizamiento.

Correa sincronizada
Motor de una lancha
Correa sincronizada
Torno paralelo
Correa sincronizada

Algunas de las ventajas de estas correas son:

Como inconvenientes principales frente a otras correas se pueden destacar:

Variantes

Correas dentadas por ambas superficies. Se caracterizan por tener un doble dentado, de manera que permiten engranar de forma simultánea con dos poleas situadas por la parte exterior e interior de la correa. Gracias a esto, pueden invertir el giro de las poleas sin alterar el sincronismo de la correa.

Materiales

Existen varios tipos de materiales para poder construir las correas. Entre ellos se destacan los siguientes: